Hebreos 10:16-17 NVI
«Éste es el pacto que haré con ellos
después de aquel tiempo —dice el Señor—:
Pondré mis leyes en su corazón,
y las escribiré en su mente.»
Después añade:
«Y nunca más me acordaré de sus pecados y maldades.»
El perdón de Dios no es como el del hombre, el hombre perdona pero difícilmente olvida, pero Dios en su infinita misericordia arroja nuestros pecados al fondo del mar y nunca mas se acuerda de ellos.
Sin embargo, muchas veces nosotros seguimos enfrascados en los errores que hemos cometido y no aceptamos ese perdón de Dios, es importante reconocer que a través del sacrificio que Jesús hizo por nosotros hemos sido justificados y por lo tanto hemos muerto al pecado y somos nuevas criaturas, no sigamos recordando los errores del pasado o las cosas que hemos vivido. Pues Dios cada día hace cosa nueva en nosotros.
Juan David Jara Rosas – Ministerio Juvenil Agua De Vida