«No descuides el don que hay en ti, que te fue dado mediante profecía con la imposición de las manos del presbiterio. Ocupate en estas cosas; permanece en ellas, para que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos, ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren»
1 Timoteo 4: 14-16
La palabra de Dios nos exhorta a no descuidar lo que Dios ha colocado en nuestra vida para su servicio, siempre debemos estar diligentes y atentos con lo que se nos ha encomendado, muchas veces vienen situaciones a nuestra vida en la que somos criticados, o sentimos que no somos tenidos en cuenta o simplemente pierdes la pasión por tu llamado, pero hoy te animo a que continúes tu camino, a que seas diligente y cultives el don que hay en ti, no permitas que las presiones de la vida te aparten de la voluntad de Dios, sigue adelante que él va a tu lado, siempre siembra lo mejor de tu vida, da tus mejores años que él se encargara de lo demás. Feliz día para todos.
Fabiola Vargas -Ministerio Agua de Vida
Trabaja Diligentemente
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