Mirando hacia atrás podemos ver que con Dios hemos atravesado diversas situaciones que en su momento fueron incomprensibles, pero que ahora viendo el resultado que tuvieron, entendemos que ciertamente fueron para nuestro bienestar

Nuevamente finalizamos un año en el que pudimos ver la mano de Dios en muchas ocasiones como también hubo unas en las que simplemente no entendimos el propósito.
Ciertamente cada día que pasó en este año Dios nos sostuvo de su mano, sus bendiciones estuvieron en cada uno de nuestros hogares, su provisión no nos faltó y su presencia siempre estuvo ahí. Todo esto es motivo de agradecimiento.
Son muchas las cosas por las cuales debemos agradecer a Dios, el 2015 fue un año de cumplimiento de promesas, un año en el que aprendimos más de El, un año en el que pudimos ver su gran fidelidad, fue un año en el que pasamos por momentos difíciles pero de ellos salimos victoriosos y más sabios, fue un año lleno de situaciones difíciles donde nunca faltó ni su Presencia ni su provisión, ¡No fue un año malo! Porque donde nuestras faltas fueron incontables, su gracia fue aún mayor.
No seamos desagradecidos, las enseñanzas que recibimos de su parte son aún más valiosas que el sustento material que nos dió.
Por eso en este día quiero que te tomes un momento para pensar en todo aquello que hizo Dios por ti y que le des gracias por su fidelidad

Por la mañana hazme saber de tu gran amor,
porque en ti he puesto mi confianza.
Señálame el camino que debo seguir,
porque a ti elevo mi alma.
Proverbios 143:8

Hoy antes de finalizar el día y comenzar un nuevo año, te invito a que te tomes un tiempo y planees tu 2016, presenta tus deseos a Dios, Él esta realmente interesado en conocerlos, si bien es cierto Dios ya tiene un plan para cada uno, pero no nos va a mandar un ángel a que nos diga qué hacer mientras esperamos sentados, no. Él quiere que planees, plantéate metas, preséntale tus deseos más pequeños y Él sincronizará eso con sus planes, Él sabe qué es lo mejor para ti y para mi y los cumplirá de acuerdo a lo que ya tiene escrito.
Para esto comienza a hacer un análisis personal, seguramente en el 2014 te propusiste cosas para el 2015 y puede ser que unas cumpliste y otras no, pero este año no te quedes sin cumplir tus propositos. Empieza reflexionando sobre lo siguiente:

Área Personal

Cuál será mi propósito principal para el 2016?
Qué debo hacer para poder ver ese propósito realizado?
Qué necesito cambiar o dejar en el pasado para poder avanzar?
Cuáles fueron mis errores en el 2015 y qué voy a hacer para no cometerlos en este 2016?
Doy buen testimonio?

Área Espiritual

Profundicé mi relación con Dios éste año?
Qué me impide acercarme más a Él?
Qué debo cambiar para tener una verdadera relación con Dios?
Cómo puedo hacer que mi servicio sea más eficaz?

Área Familiar y Social

Qué cosas quiero que cambien con respecto a la relación con mi familia?
Cómo puedo ayudar a mis familiares para que crezcan en su relación con Dios?
Cómo puedo llevar a mis familiares a que conozcan a Dios?
He llevado a otras personas a conocer de Dios?
Mis amigos saben que soy cristiano?

Reflexionemos sobre cada una de ellas, es realmente importante hacer un análisis personal y corregir lo que está mal en nosotros.
¡Extendámonos hacia lo que está adelante!
Un maravilloso año nos espera, de nosotros depende qué tan eficaz y productivo será este año.
Dios los bendiga
Feliz año

Alexandra Villamarin – Ministerio Agua de Vida