Él entonces, respondiendo, le dijo: Maestro, todo esto lo he guardado desde mi juventud. Entonces Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: Una cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz.
S. Marcos 10:20-21 RVR1960
http://bible.com/149/mrk.10.20-21.RVR1960

Buenos Días

En el anterior versículo quiero que nos enfoquemos en la parte que dice, «entonces Jesús mirandole, le amo».

Este joven se había acercado a Jesús preguntándole que debía hacer para heredar la vida eterna y si leemos al principio del versículo ante la respuesta de Jesús el contesto; todo esto lo he guardo desde mi juventud, sin embargo el aún no se sentía salvo. y esto es porque nuestra salvación no es por obras si no por la gracia y misericordia de Dios y por el sacrificio que hizo Jesús por nosotros.
Este joven procuraba guardar todos los mandamientos y hacer buenas obras pero el sabía que algo le faltaba, Jesús sabía que era eso, este joven confiaba mucho en sus posesiones y en sus riquezas les había dado el primer lugar en su vida y por esto Jesús le pidió que renunciará a esto y le siguiera.

Cuantos de nosotros podemos estar en las mismas condiciones que este joven, haciendo de todo por querer agradar a Dios, pero sabemos que aún nos falta algo, aún no le hemos entregado todo a Dios, sin embargo notemos que a pesar de esto Jesús lo miro y sintió amor por El, y eso es lo que Dios siente cuando nos mira a cada uno de nosotros, Jesús no le reprochó ni lo juzgó por su condición. Pero Jesús si le hizo un llamado a que renunciará a eso y lo siguiera, y ese es el llamado que nos hace a cada uno de nosotros, el quiere que dejemos de hacer las cosas por nuestras fuerzas, quiere que vayamos a Él y confiemos en que El se encargará de todo lo que nos haga falta.
Su mirada llena de amor nos está esperando, no nos escondamos más de Él, entreguemonos por completo.

Dios los bendiga feliz tarde un abrazo

Juan David Jara Rosas – Ministerio Juvenil Agua de Vida