“Absteneos de toda especie de mal.
Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
Fiel es el que os llama, el cual también lo hará” 1 Tesalonicenses 5:22-23
Si llevas tiempo luchando con algún hábito pecaminoso, quiero que sepas que el Señor esta hoy presto para limpiar, perdonar y sanar a todo aquel que esté dispuesto a arrepentirse, a abandonar el pecado y a decir Señor ayúdame en medio de mi debilidad.
Seguramente no comprarías agua en botella si en la etiqueta dijera que el contenido es 98% puro pero el 2% es veneno. De la misma manera Dios quiere santificarnos por completo, romper el dominio del pecado y bajo el poder de su Espíritu Santo hacernos vivir para ÉL
“Hay una hermosa ilustración griega en la que se nos narra la historia de las llamadas «sirenas» y de cómo estas atraían a los marineros con sus cantos.
“Cuando ellos se acercaban con sus barcos a escucharlas, morían al hacerse pedazos los barcos contra las rocas. Muchos intentaron cruzar el lugar con toda suerte de estratagemas, pero no lo consiguieron, los cantos de las sirenas siempre los atraían.
Uno se tapó los oídos con cera para no escuchar el canto, pero este era demasiado profundo, otros se ataron al mástil pidiendo que nadie los desatase a pesar de la belleza de los cantos, pero no fue posible. Al final a uno se le ocurrió llevar a bordo de su barco a Orfeo, un músico excepcional que cantó y tocó tan maravillosamente que las voces seductoras de las sirenas quedaron apagadas, y el barco llego seguro a puerto.
Vencieron porque escucharon una canción mejor que aquella que les llevaba a la destrucción.”
Cuando luchamos contra el mal que nos esclaviza, ya sea muy pequeño o muy grande, sólo una canción más dulce y más bella que la del maligno puede hacernos vencer; la canción de Jesús. No hay otra manera de ser libres, no se logra con disciplina o tretas espirituales. Sólo la belleza de Jesús nos puede hacer triunfar y libertar nuestro corazón.
Dios trabaja en ti y en mí para perfeccionarnos, no estamos solos en el proceso de ser conformados a su imagen. Si te sientes débil en la fe su gracia te afirmará si te sientes abrumado por las pruebas, las luchas, la soledad; su gracia te fortalece; por su gracia estarás en el lugar donde debes estar, como debes estar y con quien debes estar.
Alejandro Vargas – Ministerio Agua de Vida
Bendiciones en este día
Les comparto un link donde está la reflexión de hoy y el vídeo clip de la canción “Carpintero”
