Buenos días a todos
Les comparto el devocional para hoy
Frecuentemente en nuestras vidas nos enfrentaremos a un sentimiento causado por nuestros actos o las diferentes situaciones que ocurren a nuestro alrededor: La culpa
Se encuentra en una batalla emocional a causa de la culpa? Esa culpa proviene de Dios para cambiar algo en usted? O es que está enfrentándose a alguna clase de culpabilidad en su corazón?
La culpa puede provenir de Dios, quien nos habla al oído diciéndonos la verdad que estamos evadiendo y nos lleva a un arrepentimiento para hacernos libres de ese pecado.
Así mismo, también existe una culpa que no es enviada de parte de Dios, sino que es una culpa falsa que nos lleva a sentir tristeza y mata nuestra alma.
En la palabra de Dios hacen referencia a éstas clases de culpa:
«Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte»
Ninguno de nosotros está excento de sentir culpabilidad, desde niños nos hemos enfrentado a ese sentimiento. Quién no dijo una mentira cuando rompió algo de sus padres o hizo algo malo en el colegio? Esas y muchísimas razones más nos hicieron sentir remordimiento por nuestros actos algunas veces.
Pero qué pasa con la una y con la otra?
La culpa falsa nos hace sentir vergüenza de nosotros mismos, nos hace sentir inferiores e indignos de ver la gloria de Dios, y aunque realmente lo somos, ésta no nos permite avanzar ni tener comunión con Él. Cada vez que se sienta esa culpa debe saber que nos es Dios quien le habla, sino es la acusación de Satanás para que usted no pueda progresar. Contrario a ésta, está la suave voz de Dios que nos dice: Mi amor por ti es tan grande, que si me pides perdón de corazón, yo te perdonaré y te restauraré, serás una nueva persona y no tendrás que avergonzarte de nada, porque Yo soy tu Dios y tu eres mi hijo amado.
Dejemos que sea la voz de Dios la que nos guíe, que más que sentir vergüenza nos lleva a un arrepentimiento, pero luego nos abraza con sus lazos de amor y nos lleva a sentir lo que nadie más nos puede dar
Está luchando con el sentimiento de culpabilidad?
Medite, si es de Satanás ignorelo. Si está realmente equivocado, corra a sus pies y permitale que lo restaure.
Feliz día
Dios los bendiga
Alexandra Villamarin – Ministerio Juvenil Agua de Vida