Salmos 121:1-2 «Alzaré mis ojos a los montes; de dónde vendrà mi socorro? Mi socorro viene de Jehovà, que hizo los cielos y la tierra». El salmo 121 es uno de los tantos salmos donde podemos detenernos a mirar la grandeza de Dios en como es su majestad y támbien recurriendo a él como nuestro socorro en todo tiempo, cuando nos encontremos en dificultades vayamos a la palabra y constantemente a nuestro Dios con corazón contricto y humillado y creyendole a él tendremos descanso y él nos ayudarà en nuestra circunstancia, él nos promete en este salmo que nos va a guardar y que cuidara nuestra salida u nuestra entrada, nos guarda de todo mal, pero lo màs importante es que nos ama tanto que guarda nuestra alma. Espero que este salmo las bendiga hoy en su diario caminar. Dios las bendiga.
Cecilia Calderón – Red de Mujeres Agua de Vida