Jonás2:1-3
Entonces oró Jonás a Jehová su Dios desde el vientre del pez, y dijo:
Invoqué en mi angustia a Jehová, y él me oyó; desde el seno del Seol clamé, y mi voz oiste. Me echaste a lo profundo, en medio de los mares , y me rodeó la corriente; todas tus ondas y tus olas pasaron sobre mí.
Hermanas este pasaje nos habla de la importancia de estar orando, el poder de la oración es un motivo único para ser victoriosas en el Señor, la oración es comunión con el Padre, es un acto solemme en el cual hablamos con nuestro creador y es importante creer y entender que Dios esta junto a nosotras; cuando oremos creamos que Dios realmente esta presente a la necesidad de mi clamor.
La oración es vital y poderosa cuando yo oro esas palabras adquiere poder en la medida que activo mi fe » pero sin fe es imposible agradar a Dios» nuestra oración debe ir acompañada de adoración.
Daniel oraba tres veces al día con acción de gracias, David fue un rey de Israel que tenía su corazón conforme al de Dios, mi oración debe ser natural.
Hermanas mi invitación es para que busques a Dios en oración y que te deleites en su presencia, un feliz día para todas.
Cecilia Calderón – Ministerio Agua de Vida