2 Corintios 1: 3-5 reina valera 1960.
3 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de todas consolación,
4 el cual nos consuela en toda nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consulados por Dios.
5 porque de la manera que abundan en nosotros las aflicciones de Cristo,así abunda también por el mismo Cristo nuestra consolación.
Dios es el padre de misericordias, Dios de toda consolación,el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones para que podamos también nosotras consolar a las que estén en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotras somos consoladas por Dios.
Dios nos invita hoy a que nos acerquemos para ser consoladas en toda tribulación y poder experimentar la libertad que da el amor de Cristo Jesús.
Bendición y feliz lunes
Carmenza Gutierrez – Ministerio Agua de Vida