“Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas” Deuteronomio 6:5
Si estás leyendo hoy esta reflexión y en tu corazón existe el genuino deseo de ensanchar tu tienda, de ser de bendición a otros, de cumplir tu propósito y alumbrar para la gloria de Dios, hay un paso fundamental que no puedes eludir y es que tu vida tenga en orden las prioridades
Darle el primer lugar a Dios en el corazón no es opcional, es mandatorio para todos aquellos que decimos conocerle y para todo aquel que este acercándose a Él.
- ¿Se está apagando tu fe?
- ¿Dices estar cansada o cansado de que Dios no responda?
- ¿Dios sigue siendo importante, pero estás ocupado resolviendo tus problemas?
- ¿No encuentra Dios espacio en tu agenda pero si en tus reclamos?
He caminado más de dos décadas con el Señor y le puedo asegurar algo: Dios no pide mucho, Dios lo pide todo, pero también es eternamente fiel y recompensa mucho más abundantemente de lo que pides o entiendes.
Termino diciéndole que: nada le da más forma a nuestra vida que los compromisos que asumimos, ellos servirán para tu desarrollo o para tu destrucción. Alguien dijo dime con que estas comprometido y te diré quien serás en 10 años
¡Que nuestro primer compromiso sea con Él!
Bendiciones en este día
Alejandro Vargas
Les comparto un vídeo clip de la canción «Sinceridad» de Rabito (Juan Carlos Fernández)