"Cuando salgas a luchar contra tus enemigos y te enfrentes con caballos y carros de guerra y con un ejército más numeroso que el tuyo, no tengas miedo. ¡El Señor tu Dios, quien te sacó de la tierra de Egipto, está contigo!” Deuteronomio 20:1NTV

Hoy es un buen día para recordarte que Dios da la victoria, frecuentemente te he hablado acerca de cómo el Señor nos fortalece en medio de las luchas, nos consuela en medio de las tribulaciones, nos ayuda a sostener en medio de la tentación; no obstante quero recordarte que Dios nos fortalece para ganar.

“a ordenar que a los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya” Isaías 61:3

Hay momentos en la vida en los que atravesamos situaciones de oscuridad, de dolor, de ansiedad. Momentos en los que damos pasos, pero no sabemos exactamente hacia donde vamos y si las cosas terminarán bien.

No obstante a aquellos que caminan con Dios en medio de la adversidad, les llega el día en que sus luchas ceden, sus problemas se desvanecen y su desierto florece.

“Hablad al corazón de Jerusalén; decidle a voces que su tiempo es ya cumplido, que su pecado es perdonado; que doble ha recibido de la mano de Jehová por todos sus pecados” Isaías 40:2

Tome esta promesa en este día. El tiempo de la restauración del gozo, está llegado. El tiempo está cumplido, deje que el Señor se levante, porque Él ya le entregó la victoria.

Despójese de sus lamentos y sus dudas y gócese en Él y pase al otro lado en el poderoso nombre de Jesús.

“Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios”  Hechos 20:24

Usted fue hecho para una misión. Dios está trabajando en el mundo y quiere que usted se una a Él. Esta tarea se llama su misión. Dios quiere que tenga un ministerio en el cuerpo de Cristo y una misión en el mundo. Su ministerio es su servicio a los creyentes, y su misión es su servicio a los no creyentes