Hoy vemos con cierto asombro y con angustia, como con el pasar de los años y el transcurrir de las generaciones, el significado de la palabra “FAMILIA” se ha venido deteriorando.
La familia en vez de ser una bendición se ha convertido en una carga, Ya no es raro escuchar frases como “no soporto a mis padres”,”nos queremos divorciar” “mi familia es un desastre”.
Las noticias sobre asesinatos entre los mismos miembros de una familia crecen alarmantemente, Las relaciones incestuosas han aumentado en la última década. El pecado ha entrado a nuestros hogares, amados lectores, nos hemos preocupado por buscar lo efímero y pasajero, y nos olvidamos de lo realmente importante; la búsqueda constante de DIOS y de andar en sus caminos. “Tu camino y tus obras te hicieron esto; esta es tu maldad, por lo cual amargura penetrará hasta tu corazón.” (Jeremías 4:18)
El panorama es desolador, sin embargo la palabra del Señor en forma clara nos hace un llamado al arrepentimiento y a dejar nuestros malos caminos:”Deje el hombre impío su camino y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, El cual tendrá de el misericordia, y al DIOS nuestro, el cual será amplio en perdonar. (Isaías 55:7).
Es por eso que las familias nos vemos en la imperiosa necesidad de volvernos a DIOS, si permitimos que Él tome las riendas de nuestros hogares y dirija nuestra familia, veremos los resultados, y aunque vengan los problemas y las luchas nuestro hogar no se moverá, por que estará cimentado en la roca que es Cristo Jesús.
A continuación mencionaré principios básicos para arraigar cimientos firmes en nuestros hogares:
Devocional familiar: Es necesario que como familia busquemos a DIOS en unidad, ya que esta logra que nos fortalezcamos espiritualmente. Cuando buscamos al Señor y su palabra encontramos las grandes promesas que el tiene para los miembros de nuestro núcleo familiar.. “Bueno es Jehová a los que en Él esperan, al alma que le busca” (Lamentaciones 3:25)
Diálogo y confianza: Debemos confiar en la familia para solucionar dificultades y situaciones adversas. Frecuentemente cometemos el error de confiar más en otras personas que en aquellos que nos conocen y nos aman. A través del diálogo se pueden solucionar los problemas y conflictos, llegando así a puntos de acuerdo para corregir lo que no esta funcionando y mantener la comunión y la armonía en nuestras familias. “Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa y que no halla entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer.”(1 de Corintios 1:10)
Perdón: Perdonar las ofensas no es una opción es un mandato. Es triste ver como integrantes de algunas familias llevan meses o inclusos hasta años sin hablar entre ellos; .esta situaciones no se pueden permitir. Si usted guarda resentimiento con algún miembro de su familia, llámelo y coméntele el motivo de su enojo, y si es necesario pídale perdón. No deje que pase el tiempo, por que esto lo que logra es aumentar el rencor y la amargura. No se acueste enojado con los suyos esto le permitirá dormir tranquilo, sabiendo que usted se encuentra en paz y sin ningún tipo de resentimiento. “y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.” . (Marcos 11:25)
Definición de roles: La Biblia nos enseña que el hombre es la cabeza del hogar, él tiene la responsabilidad de dirigir con sabiduría, amar y respetar a su esposa. (Efesios 5:33).
La mujer, deber ser esa ayuda idónea para su esposo. La palabra de Dios menciona que debe ser poseedora de una gran virtud, acompañándolo en la difícil tarea de llevar una familia. (Génesis 2:18), (Proverbios 31:10).
Los hijos deben respetar y obedecer a sus padres, El Señor nos enseña que debemos honrar a padre y madre. (Mateo 15:4).
Los padres deben corregir a sus hijos, pero en ningún momento provocar su ira, si no disciplinarlos en el amor del señor. (Efesios 6:4)
Dinero: La falta de dinero logra en muchas ocasiones que el desespero y la ansiedad se apoderen de nosotros, generando en no pocas ocasiones problemas familiares. DIOS es nuestro único y suficiente proveedor, debemos pedirle que nunca falte la comida en nuestros hogares, y que nos permita tener los medios económicos para vivir cómodamente como hijos suyos que somos. “Mi Dios, pues, suplirá todo los que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús” (Filipenses 4:19)
Amor: Es necesario cultivar el amor entre esposos, a veces sucede que con el pasar de los años la relación de pareja se desgasta, no debemos olvidar que es necesario mantener encendida la llama del amor y recordarle a nuestra pareja constantemente lo mucho que la amamos, y que damos gracias a DIOS porque esta a nuestro lado. Debemos expresarles a nuestros hijos afecto y cariño, estar siempre en los momentos de alegría y tristeza junto a ellos.
No olvidemos que el Amor esta en primer lugar, y que a pesar de que vengan las dificultades y los problemas, si este es verdadero nada lo podrá apagar. (1 de Corintios 13).
Si tenemos en cuenta estos principios y los aplicamos en nuestra familia diariamente, veremos los resultados. Lo importante es perseverar y confiar en que nuestro Señor Jesucristo hará su obra en cada uno de los miembros de nuestro hogar pues si el es la base, toda la estructura permanecerá firme.
Sin importar el rol que desempeñe dentro de su familia (madre, padre, esposa, hijo…) usted puede entregar hoy su vida y la de los suyos a Jesús, el se encargará de sus problemas y verá como todo comienza a verse mas claro.
Si desea entregar su vida y su familia en las manos del Señor haga esta sencilla oración: “Señor Jesús, yo reconozco que soy pecador, te pido que perdones mis pecados, declaro que tu eres el Señor y te pido que escribas mi nombre en el libro de la vida y no lo borres jamás. Te entrego mi vida y la de mi familia para que hagas tu perfecta voluntad en nosotros. Te amo. Amen"
Carlos Andrés Jara
Ministerio Agua de Vida
